En todo México tenemos la fortuna de contar con un gran número de museos, sitios abiertos al público donde se exhiben antigüedades o colecciones artísticas. Sin embargo, existe un sólo museo donde se exhiben cadáveres bajo un proceso de momificación natural.
Es el famoso Museo de las Momias de Guanajuato, un atractivo turístico e histórico del estado que ha cobrado fama a nivel internacional por ser de los pocos en mostrar al mundo cadáveres reales que quedaron momificados de manera perpetua.
Pese a que hoy son un gran espectáculo para el visitante, la mayoría de estos seres sufrieron trágicas muertes en cuyo rostro se refleja la agonía de sus últimos instantes. La mayoría fueron sepultados vivos creyendo que habían muerto en una época donde no existían suficientes conocimientos sobre tratamientos y enfermedades.
Fue a finales del Siglo XIX cuando el Panteón de Santa Paula, el único que existía en la ciudad Guanajuato comenzó a sufrir una saturación por las continuas pestes que azotaron la región, además de las batallas durante las antiguas guerras en México.
Muchos de estos cadáveres fueron sacados de sus tumbas para ser colocados en catacumbas, sitio donde los trabajadores descubrieron que algunos cuerpos se encontraban intactos a la descomposición. Lo que comenzó siendo un secreto a voces, por el cual muchos curiosos estaban dispuestos a pagar para ver a estos cuerpos convertidos en momias.
Fue tanta la expectación de ver a estas momias que años más tarde las autoridades vieron el potencial turístico y económico, por lo que decidieron abrir el primer Museo de las Momias, el cual actualmente es uno de los más visitados en México y Patrimonio Cultural de Guanajuato.
En su interior encontrarás una gran diversidad de estos cuerpos en exhibición, muchos de ellos con sus historias plasmadas. Todos en diferentes grados de momificación, algunos ya casi en los huesos, mientras que otros aún conservan su cabello.
Despierta mucho la curiosidad y el interés por ver a cinco pequeñas momias que son los cadáveres de bebés. Infantes que murieron muy pequeños y que fueron sepultados en el Panteón Municipal a principios del Siglo XX. Posteriormente fueron exhumados y pasaron a formar parte de este museo.
Todos ellos se encuentran en una vitrina especial donde se muestran sus fotos en la parte superior de cuando estaban en vida.
Disfrutemos de este sitio con el respeto que se merecen estos seres que alguna vez tuvieron vida. Cabe señalar que su proceso de momificación es único en el mundo a diferencia de otras momias en otros países cuyo proceso fue elaborado con la intención de preservar los cuerpos.
En Guanajuato fueron las condiciones del subsuelo y la presencia de minerales lo que hizo que estos cuerpos permanecieran intactos a la descomposición y pasaran a convertirse en las momias más visitadas de México.
Para mayor información sobre visitas, entra a su sitio oficial: http://www.momiasdeguanajuato.gob.mx/
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